¿Has dejado de fumar? ¡Cuida tu dieta!


Has conseguido dejar de fumar y tienes miedo de que esto te haga ganar unos cuantos kilos. No te preocupes, si sigues algunos consejos que te proponemos a continuación, no tienes por qué aumentar de peso.

Lo principal es que sigas unos hábitos alimentarios saludables. No significa que tengas que dejar de comer, sino que la dieta que sigas sea rica y equilibrada. Ponte un horario que te impida picar entre horas. Lo conseguirás si estableces cinco comidas: desayuno, almuerzo, comida, merienda y cena. Es importante que no te saltes ninguna comida, porque si no llegarás a la siguiente con más hambre y ansiedad y comerás más. Cada vez que tengas ganas de fumar, bebe un vaso de agua en lugar de encender un cigarrillo o picar algo.

En tu despensa, procura tener siempre leche desnatada o semidesnatada, yogures, pan tostado, fruta, lechuga, huevos, patatas, infusiones, pescado, pasta, arroz, verduras, legumbres y carne como la de  pollo, conejo o pavo.

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