El olor a tabaco no se eliminará de la noche a la mañana. Deberás atenuarlo poco a poco siguiendo esta receta casera a base de vinagre.
El primer paso será llenar una olla con agua; luego, ponla a calentar echándole un tercio de vinagre blanco. Deja que hierva un cuarto de hora, y sitúala en las habitaciones que se han impregnado del olor a tabaco.
Verás que el aroma del vinagre se apoderará de la habitación al instante. No tengas miedo, al pasar de las horas el vinagre desaparecerá llevándose el olor a tabaco.